Si fusionáramos la esencia de SHENMUE con la de GRAND THEFT AUTO, de inmediato, nos aparecería este SLEEPING DOGS; un juego sobresaliente que me ha costado mucho analizar:
El primer contacto fue muy frío, lo reconozco, pues olía a Shenmue por todas partes, y para mí, Shenmue es el videojuego más grande jamás realizado en la historia (que nos agrade o no, ya es cuestión de gustos). Pero ese fue mi error, comparar y no ser justo con las propiedades particulares del juego.
En realidad, se nota a la legua que la obra magna de Yu suziki les impresionó a estos desarrolladores, por que su sistema de combate, la reacción e interacción con el entorno y parte de su estilo, bebe directamente de la joya de la corona de Dreamcast.
La diferencia con Shenmue es clara: no tiene ese aire místico y mágico, y tampoco comparte la sensación cálida de odisea. Sleeping Dogs es frío, y basa su ambientación en una ciudad corrupta, llena de gente despreciable. No hay magia, insisto, hay violencia, drogas, carreras, robos… Grand Theft Auto.
La cuestión es que la mezcla les ha salido redonda, porque el juego engancha de forma brutal, creando un entorno mucho más rico y atractivo que el de GTA4, pero otorgando ese tipo de ambientación tan personal que nos regaló Shenmue.
Sleeping Dogs no es ni lo uno, ni lo otro, es la mezcla perfecta de ambos, y así nos lo recordará durante toda la aventura.
Sleeping Dogs tiene un problema inicial bastante decepcionante, y es que si bien la primera toma de contacto (persecución estilo QTE a lo Shenmue) en los muelles es sobresaliente, minutos después nos reta a superar varias misiones basadas en peleas, que dan la sensación de vacío más grande que he jugado en lo que va de
año.
Son tres misiones seguidas que se basan en lo mismo: golpear, sin darnos opción a movernos por la ciudad o a descubrir otros modos de juego. La verdad es que son satisfactorias, pero pueden llevarnos a engaños, porque da la sensación de que será constantemente igual… nada más lejos de la realidad.
Gracias a dios, pasada la media hora inicial de juego, nos encontramos con una ciudad entera para explorar, con dos tipos de misiones (definámoslas como de buen Karma y de mal Karma), búsquedas de ítems, posibilidad de utilizar y/o robar vehículos (inclusive de robarlos en marcha, al estilo del penoso THE WHEELMAN), pelear, buscar Dojos para conseguir nuevos movimientos (esto suele hacerse a veces a través de personajes secundarios), competir en carreras, comprar ropa…. En fin, un abanico rico en posibilidades y del que es difícil hablar mal.
El sistema de combate es genial, permitiéndonos utilizar tanto golpes ofensivos como técnicas defensivas, además de permitirnos utilizar a nuestro favor diverso mobiliario
urbano (con efectos exquisitos en muchos casos). Aprenderemos nuevas técnicas hasta convertirnos en auténticas armas de matar.
El modo de conducción también es muy acertado, recordando al empleado en Midnight Club Los Angeles, pues comparten esa “inquietud” en su control. Algunos vehículos (como la moto inicial que tenemos en nuestro garaje) son fáciles de llevar pero, en cambio, los transportes más potentes, tanto de cuatro como de dos ruedas, serán difíciles de domar. Cosa que se agradece.
Cuando vayamos a pie, tanto en misiones, como en el modo libre, podremos enfrentarnos a “falsos QTE”, que nos permitirán movernos en 100% tiempo real (esquivando obstáculos o transeúntes), pero que nos exigirán pulsar el botón mostrado en pantalla en el momento oportuno. Este modo es genial, pues logra no romper con el tempo de juego, debido a que no hay pausa ni transición. Su implementación es fantástica y genuina.
Sleeping Dogs es un producto genial en su jugabilidad, es de esos juegos que cuanto más los juegas, más quieres.
A nivel técnico el juego es notable, sobre todo en su versión PC, que cuenta con un DLC gratuito de texturas en alta resolución (cosa que lo hace mejorar enormemente). Respecto a este DLC, comentar como anecdótico, que resulta que el juego tras su instalación ocupa unos 6-7 Gb, pero al actualizarlo en “steam”, se convierten en casi 12… Es curioso ¿no?
El modelado es bastante bueno (aunque artificial), tanto para personajes como para entornos, siendo superior en conjunto a lo mostrado en GTA4, pues en Sleeping Dogs se nos muestran (de forma muy acertada) porciones más pequeñas de la ciudad, pero con más detalle (aunque con diferente estilo).
Los efectos de iluminación son francamente buenos, encontrando algunos efectos asombrosos, como las chispas o los fuegos artificiales.
A nivel de animación es también muy competente, sin llegar a la perfección, pero resultando sobresaliente, sobre todo, en las escenas de lucha.
A nivel sonoro nada que objetar, pues cumple muy bien, con variados estilos de música y efectos de sonido bastante buenos. El juego solo viene con los textos traducidos, lo que por otra parte se agradece, pues el doblaje en inglés es muy bueno.
El juego es compatible en PC con el mando de Xbox 360 y solo es funcional en Windows Vista y 7 (recomiendo hacerlo funcionar en Windows 7 32Bits).
La diferencia entre PC y consolas es marcada, pero sin exagerar, siendo lo más llamativo la resolución y definición de PC (muy superior) junto a una tasa de imágenes por segundo de 30 (PS3-Xbox 360 ) a 60 (o más sin Vsync) en PC. En cualquier caso, la versión de consolas es fantástica y hay que tener en cuenta que, para ser un “mundo abierto”, la calidad de texturas, personajes, animación y modelados es bastante alta.
En cuanto a la trama, decir que es bastante correcta, mezclando un guión típico del cine policíaco de bandas (made in Hong Kong) con las típicas sub-tramas basadas en el pasado oscuro del personaje, resultando en un todo efectivo.
MI OPINIÓN
Sleeping Dogs es un juego altamente recomendado, que nos recordará a partes iguales a Shenmue y a Grand Theft Auto, sin llegar a ser nunca ninguno de los dos títulos. A nivel jugable es un juego a destacar, igual que en su faceta técnica, que sin ser un producto potente en exceso, se las apaña para resultar más atractivo que el resto de sandbox existentes.
No quiero que nadie se lleve a engaños, pues Sleeping Dogs no es Shenmue, ni lo pretende, pero arranca desde un punto de vista similar al empleado por Yu Suzuki. Y solo eso, ya es bastante reclamo como para hacerse con el. JUEGO RECOMENDADO.
Quiero deciros que durante varias semanas he querido ver en este juego algo que no hay, e incluso me decepcionó de inicio. Sin embargo, y tras muchas horas de juego, debo quitarme el sombrero y aplaudir a United Front Games, que ha creado un producto altamente disfrutable.