Toki ha sido portado a distintos sistemas, pero en todos se daba un denominador común: una conversión que no hacía justicia a la asombrosa y carismática jugabilidad del arcade original… hasta que Atari lo versionó para su Lynx…
Así pues, puedo afirmar sin que me tiemble el pulso, que la versión de Lynx es la más fiel y acertada, a la par que una gran conversión a nivel gráfico y sonoro,
redondeando en un cartucho imprescindible y brillante.
Toki en Lynx lo tiene todo; haciendo palidecer en conjunto al resto de versiones. Respeta su alta dificultad, sus niveles y “power-ups”, escapando por completo de lo que ofrecían versiones tan distantes del original como la de Megadrive, que era bastante irregular y sosa.
Un juego del tipo “Scroller”, a contra reloj, donde el simio más famoso de los videojuegos de los 90 las pasará canutas (más bien, nosotros) para superar sus difíciles niveles y acabar con los “final bosses” más coloristas de cuantos podamos encontrar en Lynx.
El sonido de Toki es correcto, mostrando una gama rica y definida de efectos, acompañando a buen ritmo durante toda la aventura, obviamente, teniendo siempre en cuenta las limitaciones propias del sistema en cuestión.
Toki es un juego de acción y plataformas “gigantesco”; el mejor representante del género en Lynx (y casi el único…) convirtiéndose en un título imprescindible para la tremenda consola de Atari que, como siempre, nos demuestra que, todo y su catálogo algo limitado, está plagada de joyas de alto nivel que superan en cantidad y calidad a sus respectivas versiones para “sistemas más potentes”.
Gracias a Dios, Toki es un juego bastante fácil de encontrar en su versión Lynx, con un precio algo superior a la media, pero, contando con un desembolso que en ningún caso superará los 25€ - 30€, por lo tanto, no hay razón para no hacerse con esta joya lúdica.
MI OPINIÓN
Creo que ya está dicho todo; un juego fácil de analizar y con poco que contar sobre él. Un juego que transmite sensaciones maravillosas (muy retro), imposibles de describir con palabras. Un título indispensable para cualquier coleccionista y más aun si lo es de Atari.